‘Una presentadora robotizada, un jurado entrometido y un libro’

Lo mejor de MasterChef son sus concursantes. Lo cierto es que nunca he visto antes ninguna edición porque la cocina no es una de mis grandes aficiones, ni de lejos, pero lo cierto es que el programa engancha por el buen casting: la vegetariana hippie, la señora vasca con gracia, el banderillero sentío… Un poco de todo, como en un buen guiso. Sin embargo, los que verdaderamente cobran por su trabajo son los que menos me gustan:

Eva González me transmite distancia y demasiada rectitud, cuando debería ser un provechoso nexo de unión entre concursantes y jurado. Le falta empatía y naturalidad por todos los costados. Resulta muy impostada cuando intenta crear conflictos entre ellos, algo que en pocas ocasiones consigue: eso ya es un arte de reality y para ello existen grandes maestros de ceremonias que saben sacar lo mejor y peor del concursante de televisión en cuestión.

Jurado. Está bien que sea cañero, pero hay líneas que, creo, no deberían pasar por no estar dentro de su campo de actuación. En la última cita con los masterchefs, ayer por la noche, Miri como jefa de cocina decidió eliminar a Jorge del juego de expulsión, algo que no gustó al Jurado porque consideraban que el merecedor de dicho privilegio debía ser el torero: se lo recuerdan y la machacan con eso continuamente durante todo el programa. A mi parecer no deberían ser tan entrometidos, si el concurso fluye bien ya son los mimos concursantes, como se vió, los que se dedican a criticar directamente la convivencia. No queda elegante que lo haga un jurado con tantas estrellas Michelin, sino el espectador ve esto: un jurado de dimes y diretes y se pone a la altura de cuatro anónimos que van a aprender a cocinar y pelear, también verbalmente y con zancadillas, por el codiciado premio.

Ese libro metido a calzador es una situación tan surrealista que me recuerda más a una secuencia cómica de José Mota que a un momento de tensión como el que vivió Selene donde se jugaba su expulsión, en el último reto: casi en el último minuto  y aprovechando el estés de la concursante mientras cocinaba Samanta le regala el famoso libro y le echa la chapa promocional. ¿Qué pretende? ¿Qué se ponga a ojearlo para seguir haciendo publicidad en ese momento tan relajado y distendido?

Publicado por Kaik Espada

Soy un periodista al que le apasiona por partida doble la tele: trabajo en ella y, como me sabe a poco, la disfruto desde casa. Mis favoritos: de pequeño 'EL gran juego de la Oca, de adolescente Gran Hermano y ahora 'La que se avecina'.

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Imagen de Twitter

Estás comentando usando tu cuenta de Twitter. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s

A %d blogueros les gusta esto: